Redactado por Jason Martin (@10_jasonmartin)
John Degenkolb ha conseguido alzar los brazos en el velódromo de Roubaix, en esta 113 edición de la Paris-Roubaix, después de imponerse al sprint a los siete supervivientes de esta dura y emocionante carrera, disputada sobre un trazado de 253 kilómetros entre Compiegne y Roubaix llena de cotas adoquinadas divididas en 27 sectores de distinto nivel y exigencia.
John Degenkolb ha conseguido alzar los brazos en el velódromo de Roubaix, en esta 113 edición de la Paris-Roubaix, después de imponerse al sprint a los siete supervivientes de esta dura y emocionante carrera, disputada sobre un trazado de 253 kilómetros entre Compiegne y Roubaix llena de cotas adoquinadas divididas en 27 sectores de distinto nivel y exigencia.
El fuerte viento del sureste de Francia y los durísimos pasos adoquinadas de 5 estrellas como El Bosque de Arenberg, Mons-en-Pevele o Carrefour de l’Arbre hicieron que algunos favoritos que se habían descolgado a la cola del pelotón se quedaran cortados y sin opciones de luchar por la victoria de etapa, el nerviosismo que había en el pelotón tampoco ayudo ya que por culpa de ese factor algunos corredores importantes del pelotón acabaron besando el polvo de esta gran carrera que año tras año consigue reunir a mas gente apasionada por este deporte.
Los nueve valientes que formaron la fuga del día fueron: Grégory Rast (Trek), Adam Blythe (Orica-GreenEdge), Alexis Gougeard (Ag2r La Mondiale), Sean De Bie (Lotto-Soudal), Aleksjes Saramotins (IAM Cycling), Pierre-Luc Périchon (Bretagne-Séché), Tim Declercq (Topsport-Vlaanderen), Frederik Backaert (Wanty-Groupe Goubert) y Ralf Matzka (Bora-Argon 18).
Pero el gran trabajo del Etixx en el pelotón, con la intención de repetir la hazaña del año pasado, causo sus efectos y consiguió la primera selección importante del día, dejando cortados a corredores importantes como el gran favorito para llevarse la carrera Alexander Kristoff o el británico Bradley Wiggins que ya reiterado varias veces que esta sera su última carrera con Sky.
De inmediato los chicos del Katusha y del Sky cogieron el mando del grupo atrasado y se pusieron manos a la obra, por otro lado en la fuga en paso de los kilómetros hacia que la escapada empezara a perder unidades con su consecuente perdida de tiempo respecto al grupo perseguidor.
De inmediato los chicos del Katusha y del Sky cogieron el mando del grupo atrasado y se pusieron manos a la obra, por otro lado en la fuga en paso de los kilómetros hacia que la escapada empezara a perder unidades con su consecuente perdida de tiempo respecto al grupo perseguidor.
El corredor belga del Etixx Stijn Vanderbergh intento buscar el corte en solitario en la salida del paso adoquinado, pero no lo iba tener tan fácil Wiggins vio que este podía ser una fuga importante y se marcho junto al campeón belga Jens Debusschere, por detrás Katusha que no le interesaba para nada que esto saliera adelante puso a sus hombres a trabajar y la fuga viendo que esto no iba a ninguna parte decidieron parar y reagruparse al pelotón.
Viendo que el paciente ritmo del pelotón no le beneficiaba Borut Bozic decidió probar suerte y marcharse junto al belga del Lotto-Soudal Jurgen Roelandts, por otro lado las malas noticias empezaban a llegarle al Lotto Jumbo ya que su hombre fuerte Sep Vanmarcke empezaba a perder contacto con el pelotón.
Al final el gran trabajo de Niki Tepstra en el pelotón dio sus frutos y a falta de 13 kilómetros para la linea de meta la aventura de Roelandts llego a su fin, así quedo el tablero de ajedrez tras mas de 253 épicos e infernales kilómetros con 27 cotas adoquinadas.
A falta de 10 kilómetros para llegar al clásico velodromo que le da el punto y final a esta magica carrera, Greg Van Avermaet (BMC) y Yves Lampaert (Etixx) probaron fortuna y decidieron salir del grupo cabecero, pero al poco los hombres del Giant-Alpecin observando que esa situación de carrera no les beneficiaba para nada De Backer y Degenkolb tuvieron que salir en busca del dúo aventajado.
Pero el poco entendimiento de los de adelante hizo que el grupo llegara unido al velodromo ahora todo seria cosa de que cada uno jugara bien su estrategia y rezar por que el vencedor de la Milan-San Remo, John Degenkolb no tendría su día, pero para desgracia para el resto el alemán estaba mas motivado que nunca y consiguió imponerse con mucha superioridad.
Con esta victoria el chaval que de pequeño soñaba con llegar a ser un buen policía conseguía hacerse toda una leyenda y ascender al olimpo de los grandes ciclistas de la historia ganando la Milán-San Remo y la Paris-Roubaix en una misma temporada como ya hiciera en su día Sean Kelly.
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