domingo, 18 de enero de 2015

West Ham United 3-0 Hull City: rumbo a Europa

Por Nizar SADELLAH (@Hohenheim77)

Se impone la lógica en el segundo tiempo.


En el mítico Upton Park, se enfrentaban dos clásicos de la Premier. Clásicos porque, en la mejor liga del mundo, son de los pocos que no han dejado por completo el “kick & rush” vestigio de la tradición futbolística inglesa. Sus entrenadores son de los más carismáticos de la Premier: “Big” Sam Allardyce y Steve Bruce, que fue llamado a ser el heredero de Sir Alex Ferguson por el mister “himself”.

Eso sí, la trayectoria de ambos conjuntos esta temporada es diametralmente opuesta. West Ham estaba hasta hace poco en puestos europeos y está impresionando. Es cierto que sale de un bache complicado, pues no ha ganado ninguno de sus últimos 4 encuentros en liga, pero acaba de eliminar al Everton en Copa. Es el segundo equipo que más goles ha marcado a balón parado (y eso que no ha conseguido marcar un penalti aún) y ya han marcado 10 goles de cabeza (máximo en la Premier).

En cambio, Hull City no es el equipo que era la temporada pasada, salvándose sin problemas y llegando a la final de la FA Cup. Esta temporada, está en puestos de descenso casi desde el inicio, y parece que se va a quedar allí hasta el final. Los hombres de Steve Bruce sólo han ganado 2 partidos a domicilio, 1 de los últimos 10 en Liga. En cambio, West Ham sólo ha perdido 1 de los últimos 10 en casa en todas las competiciones.

Los “Hammers” recuperan a Reid, aunque Diafra Sakho sigue lesionado. Kouyate está en la Copa de África con Senegal. Por otro lado, los “Tigers” tienen la enfermería llena, con Abel Hernández, Jelavić, Diamé, Robertson, Rosenior y Snodgrass todos lesionados. Lo único positivo para Steve Bruce es que Huddlestone, Gastón Ramírez y Sone Aluko están recuperados.


Acababa de sonar el famoso “I'm forever blowing bubbles” en Upton Park cuando Aluko precisamente se deshizo de Tomkins para llegar hasta linea de fondo y poner un balón que dio en Noble para el primer saque de esquina del partido. Aún no había acabado el minuto 1' y el nigeriano ya anunciaba que el primer tiempo iba a ser el “Aluko show”. En el minuto 5', Aluko se escapó otra vez de Tomkins para poner un gran centro que remató el lateral izquierdo El Mohamady, pero la volea del egipcio no encontró portería.

El West Ham iba a tener su primera oportunidad, después de una falta lejana que jugaron en corto, para el lateral Cresswell. Éste disparó de casi 30 metros y su intento pasó por muy poco al lado del palo derecho del portero McGregor. Pero los hombres de “Big Sam” tenían muchas dificultades en conectar en la media cancha, por culpa de una muy buena presión del Hull City, obligando a los Hammers a abusar del juego en largo.

En el minuto 23', otro desborde de Aluko, quién estaba amargándole la tarde a Tomkins, hizo que el nigeriano se encontrase solo frente a Adrian, pero se cruzó de manera providencial el otro central, Collins, para mandar fuera. Tres minutos más tarde, Aluko, otra vez, regateó a tres defensas del West Ham para hacer una pared con Livermore. El pase de vuelta no fue preciso y los Hammers pudieron despejar.

El West Ham tardó 30 minutos en hacerse con el dominio de la pelota, y empezó a controlar mejor los ataques del visitante, combinando mejor entre ellos. 5 minutos antes del descanso, los de Allardyce estuvieron a punto de hacer lo que mejor hacen: marcar de cabeza. Tuvieron 2 oportunidades seguidas, pero McGregor salvó los muebles en ambas ocasiones. En la última acción del primer tiempo, en un choque entre James Collins, el rocoso galés del West Ham, y Chester, su tocayo y paisano, el defensa del Hull se lesionó y tuvo que abandonar el terreno de juego. Se sospecha que el lateral se haya dislocado el hombro, lo que supone otra muy mala noticia para Steve Bruce en el aparte de lesiones.

La charla de Big Sam en el descanso tuvo que ser algo muy especial porque el West Ham salió del vestuario con un cambio de actitud total. Los Hammers estaban mucho más agresivos y se notó inmediatamente. Quizás tuvo que ver también los cambios obligados del Hull. No sólo entró el hondureño Figueroa por el lesionado Chester, pero también Maguire por el hijo del entrenador. Alex Bruce recibió un golpe poco antes del descanso y debio de ser la razón por la que no pudo seguir.
En el minuto 2' del segundo tiempo, una internada de Downing por la banda le permitió poner un centro en el área. El balón fue desviado pero le llegó a Nolan, quién esperaba en la frontal de la misma. Su volea acabó como la de El Mohamady en el primer tiempo, pero esto era el primer aviso.

Un minuto más tarde, Enner Valencia lanzó un buen disparo desde la cruceta, que McGregor tuvo muchas dificultades en atajar. El rechace le cayó a Carroll, el gigante delantero, quien se adelantó muy bien a su marcador Davies, y sólo tuvo que empujarla el una portería vacía. 1-0!

El delantero ecuatoriano al origen del primer gol marcó el segundo, pero fue anulado por un fuera de juego bastante dudoso, pues la repetición parece mostrar que estaba en la misma linea que su defensa. Esto no iba a tener mucho impacto en el partido. Lo que sí iba a tener impacto es el cambio que hizo Allardyce, al dar entrada al francés Amalfitano por Mark Noble. Este cambio les iba a quitar contundencia en el medio a los Hammers, pero les iba a dar más percusión con la velocidad del volante, ex del Olympique de Marseille. También iba a permitir que Downing jugase en su puesto de predilección, en el centro, por detrás del punta.

Apenas 4 minutos después del cambio, una buena presión de Nolan en el centro permitió que Song recuperase la pelota y lanzase inmediatamente a Valencia por el centro. El delantero, ex del Pachuca, fijó a dos defensas antes de pasársela a su derecha al recién incorporado Amalfitano. El francés que llegaba como un cohete, pasó a su marcador Figueroa y se encontró en posición de uno contra uno frente al portero escocés del Hull. Con toda la sangre fría del mundo, picó la pelota por encima del arquero del Hull para que Upton Park gritase el 2-0.

Los Tigers estaban hundidos y el tercero no tardó en llegar. Otra recuperación de Song en campo propio y el camerunés lanzó con un pase muy preciso a Downing por detrás de la defensa. El elegante mediocampista tenía todo el campo del Hull por delante y definió sólo, con mucha clase y un poco sobrado, al primer palo de McGregor, quién no pudo hacer nada después de haber sido abandonado por su defensa.

El resto del partido quedaba para el olvido, sobre todo para el Hull City, que no consigue sacar la cabeza del agua. El West Ham pode seguir soñando con Europa, ya que con esta victoria se pone a 4 puntos del Manchester United, cuarto. Eso sí, el calendario que tienen por delante no es nada fácil; Liverpool, Southampton y Tottenham a domicilio y Manchester United en casa.
Para el Hull, que duerme en puesto de descenso, la próxima oportunidad de salir del dique seco es dentro de 2 semanas, cuando reciban al Newcastle.

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