martes, 24 de junio de 2014

Corea solo jugó 45 minutos

Por Pablo Fuste (@pablo_fuste)

La mejor generación de futbolista de la historia de Argelia ha logrado una histórica victoria ante Corea del Sur que le deja a un paso de meterse en octavos de final. 32 años después de que en España’82 derrotase a Chile, los argelinos han goleado a Corea con una exhibición de fútbol directo. Argelia se convierte en el primer equipo no europeo o americano en lograr cuatro goles en un partido de un Mundial.

El potencial ofensivo de Argelia, adormecido ante Bélgica por el temor de su seleccionar, relució más que nunca ante un equipo muy débil en defensa como es Corea. Bentaleb, Feghouli, Brahimi y Slimani fueron un grupo demasiado poderoso para el entusiasmo asiático y sentenciaron el partido en una primera parte primorosa. Slimani, Halliche, Djabou dejaron visto para sentencia, con sendos goles cada uno, un partido que deja a Corea al borde de la eliminación.

La selección argelina supo entender dónde sufría su rival y comenzó a colgar balones largos a la espalda de la defensa con los que sorprender a unos centrales poco acertados. Tras dos intentonas fallidas, a la tercera llegó el primer gol de Argelia. Mejdani colgó un balón a la carrera de Slimani y este se zafó de los dos centrales para batir con un suave toque con la izquierda a Jung.

Argelia fue mejor
Corea no tuvo tiempo de reaccionar y menos de dos minutos Argelia volvió a golpear. Halliche remató de cabeza de manera contundente un córner y ponía muy cuesta arriba el encuentro para los de Hong Myung-Bo, seleccionador coreano y balón de plata en el Mundial celebrado en su país en 2002.

Argelia disfrutaba como nunca había hecho antes y amenazaba con la goleada a un Corea acomplejada. Y fue Djabou el que logró el tercero para delirio del país africano. Una goleada tan sorprendente como merecida para un equipo cuyo potencial ofensivo compensa sus debilidades defensivas.

En la segunda parte el equipo Myung-Bo mejoró y fue capaz de hacer el fútbol que le ha traído hasta el Mundial 2014. Un juego coral muy solidario en el que todo el mundo se mueve para buscar el espacio y dar soluciones tácticas a quien lleva el balón. Su empuje se vio recompensado con un gol tempranero en la segunda parte. Son se encontró un balón en el área y tras revolverse redujo distancias con un chut por debajo de las piernas del portero argelino.

Se crecía el equipo coreano, mientras Argelia intentaba protegerse y tirar contragolpes cuando podía. Y en uno de ellos, una combinación entre Brahimi y Feghouli terminó con el gol del primero. El del Valencia arrancó la jugada y tras dos paredes el del Granada se plantaba ante el portero para dejar el partido visto para sentencia. Koo reduciría distancias, pero Corea no sería capaz de acercarse más en el marcador. Corea se queda cerca del adiós, mientras que Argelia sólo necesita un empate ante Rusia para lograr la heroicidad de meterse en octavos.

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