Por M. David C. Martín. (@MDavidCorrea)
El Getafe consiguió una victoria fundamental en sus aspiraciones de asegurar la permanencia en la categoría la próxima temporada, venciendo por 2-1 al Deportivo de la cabeza que, por contra, no levanta cabeza, y sigue inmerso en las posiciones de coqueteo con el descenso a segunda división. Los goles de Alexis y Escudero en la primera parte carecieron de valor al conseguido por Toché en la segunda mitad. El Geta llega a los 32 puntos mientras que el Depor sigue con 26.
Se enfrentaban en el Coliseum dos equipos que vivían una de sus 10 finales por delante para intentar conseguir el objetivo de amarrar la permanencia, o por lo menos, ganar en tranquilidad, respecto a las jornadas venideras que se presentan. Sólo uno de ellos pareció salir decidido a cumplir el objetivo, pues a judgar por lo visto en los primeros 45 minutos, el Getafe se estaba jugando la vida y el Deportivo parecía tener un colchón respecto al descenso considerable. Todo, muy lejos de la realidad.
El conjunto local, entrenado por Pablo Franco, el tercer entrenador que tienen esta campaña, venía de dos derrotas consecutivas, una en casa contra la Real Sociedad y otra ante el vigente campeón en su casa, en ambas no consiguió marcar, así que el partido de ayer se le presentaba como una buena manera de refrendar su camino en la competición y darle una alegría a su afición, que tantos calvarios les están tocando vivir. Por su parte, el conjunto gallego llegaba a la capital de España con el firme deseo de salir de la quema, puesto que, con 26 puntos, marca la salvación en primera división a los 3 inmersos en la zona de descenso. Para intentar aprovechar los pinchazos de los equipos en la zona de descenso, todos perdieron en la jornada sabatina y el Granada había sido apabullado en el Bernabéu durante la matinal del Domingo, pues era una oportunidad de abrir hueco con las respectivas posiciones de descenso. Una oportunidad perdida, otra más, por los hombres de Víctor Fernández.
La primera parte sólo tuvo un color, el azulón de la camiseta del Getafe, que se encargó desde el minuto uno de poner en cerco la portería defendida por Fabricio, que atajaba como podía y su defensa los ataques del conjunto local. Pero la defensa del Deportivo no se caracteriza precisamente por ser consistente ni fiable, pues la pareja Sidney- Insua fue un auténtico coladero junto con los laterales, Laure y Luisinho. Por ahí canalizó el Getafe todo su arsenal, que con las incursiones de Diego Castro y Pedro León y bajo la dirección de Pablito Sarabia, ponían en jaque a la defensa gallega. Y poco tardó el Getafe en marcar el primero, en un saque de esquina que sacó desde la parte izquierda Sarabia, ni la defensa del Depor consigue despejar ni el ataque del Getafe marcar, pero un balón que queda muerto en la frontal es introducido por Velázquez para que, el ayer lateral derecho, Alexis Sánchez, aprovechase el despeje en la mala salida del guardameta y consiga inaugurar el marcador para el conjunto azulón. Primer cuarto de hora ( minuto 17) y el Getafe ya mandaba en el partido, y el Deportivo ya tenía que ir contra corriente.
El Depor intentaba llegar al arco de Guaita, pero sus intentos se quedaban frustrados en la muralla defensiva construida por Pablo Franco. Ante las bajas en los laterales, salvo Escudero, la línea defensiva azulona estaba compuesta, integramente, por centrales.
La primera parte continuó igual, el Getafe más tranquilo por su gol conseguido pronto, se sentía espoleado por el público para intentar cerrar el choque antes del descanso, Y es que cuando tu rival no da síntomas de querer entrar en la pelea, tienes que intentar asestar un golpe definitivo para que luego no te cueste el partido en los segundos 45 minutos.
Dicho y hecho, Y el Getafe lo llevó a la práctica, continuó sin levantar el pie del acelerador, y en una de esas jugadas, llegó un nuevo despiste de la zaga gallega, que repito, no tuvo su día, y no fue capaz de neutralizar el segundo gol del equipo local.
Una jugada por banda entre Pedro León y Sarabia acabó con el balón en el área gallega, que ni la defensa ni el portero consiguieron despejar y apareció el más listo de la clase, que fue Diego Castro, para llevarse el esférico, dejarlo atrás para que Sarabia con su visión de juego rápido y veloz viese la llegada SÓLO de Sergio Escudero, repito SÓLO, y el lateral izquierdo sin oposición batió las mayas de la portería del Deportivo. Un fiasco defensivo y un aluvión de fútbol sin enamorar que sirvió al Getafe para un poco más de la media hora de partido, colocarse 2-0 en el marcador.
Si el Depor pretendía comenzar la remontada en el Coliseum. desde luego con la imagen de la primera parte no va a ningún sitio. Más tarde, en rueda de prensa, su entrenador declaró " que habían tirado los primeros 45 minutos" y cuando te encuentras en una situación de lucha permanente por evitar los puestos de descenso, no puedes regalar ni el aliento a tu rival. Descanso en el Coliseum y 2-0, partido relativamente controlado por el Getafe que si no quería sustos tendría que haber sentenciado en la segunda mitad.
El gol de Escudero puso el 2-0 en el luminoso.
En la segunda parte. la regañina de Víctor, el pundonor de los gallegos y el coraje por los aficionados desplazados hasta la capital, harían que el Depor mejorase, eso, y las permutas realizadas por el técnico gallego, que sacó del terreno de juego a Fariña y Juanfran e introdujo a Toché e Isaac Cuenca, que junto a la velocidad y verticalidad de Lucas Pérez y el remate de Oriol, llevaron más peligro al arco de Vicente Guaita. Tambíén fue introducido Cavaleiro, que se especulaba con su titularidad, pero finalmente fue Juanfran quien ocupó su banda, pero el caboverdiano tuvo que abandonar a los 20 minutos de ser inmerso en el césped.
El Depor lo intentó, pero, lo que se habla siempre en la capital coruñesa es de esa falta de gol que tiene el equipo gallego, que sí, que puede hacer buenos partidos, que llegar llega, que crear crea pero no remata ni acaba finiquitando las jugadas con éxito.
Tuvo que ser en el minuto 78 cuando una de tantas incursiones por banda izquierda de Cuenca acabase con un remate en la posición del primer palo, de 9, de Toché, para batir por raso a Vicente Guaita. El Depor se metía en el partido, quizás sin tiempo, pero se metía con el gol del delantero murciano. Ante la ofensiva gallega, Pablo Franco tuvo que reordenar a sus hombres, e introdujo en el campo a Freddy, Naldo y el canterano Felip, sustituyendo a Sarabia, Alexis y Pedro León.
Para ganar seguridad y consistencia atrás, e intentar matar el partido a la contra, pues el fondo de armario del conjunto azulón es limitado, igual que la duración de la gasolina de sus hombres. El Coliseum se impacientaba con la tardanza del final del choque, pero en ningún momento el Deportivo tuvo una clara que pudiera inquietar a Vicente Guaita, jugaban con corazón pero sin cabeza, quizás haber salido así en la primera parte les hubiera dado un impulso más en el partido y no haber perdido una posibilidad real en una final por salir de la quema.
El final llegó y con él la explosión de jubilo de los aficionados getafenses, que vuelven a ver ganar a su equipo en casa, ante un rival directo, y que respiran más tranquilos en relación a las jornadas venideras. Por contra, los gallegos se sentían tristes, pues habían tirado la primera parte y en la segunda fueron incapaces de nivelar la contienda.
En definitiva, un choque que deja al Getafe a 9 del descenso, respirando más tranquilo, y al Depor coqueteando con esa posición de quema, que ahora mismo ocupa el Granada. A ver si para la próxima cita CRUCIAL de este miércoles en Riazor contra el Córdoba sirve a los gallegos para darse cuenta de que los partido empiezan en el minuto 1, no cuando te han metido 2 goles en contra. El Getafe jugará en Elche, ante otro rival que también se está jugando la vida y que no atraviesa por su mejor momento institucional. Veremos que nos depara la jornada intersemanal.
El Getafe consiguió una victoria fundamental en sus aspiraciones de asegurar la permanencia en la categoría la próxima temporada, venciendo por 2-1 al Deportivo de la cabeza que, por contra, no levanta cabeza, y sigue inmerso en las posiciones de coqueteo con el descenso a segunda división. Los goles de Alexis y Escudero en la primera parte carecieron de valor al conseguido por Toché en la segunda mitad. El Geta llega a los 32 puntos mientras que el Depor sigue con 26.
El conjunto local, entrenado por Pablo Franco, el tercer entrenador que tienen esta campaña, venía de dos derrotas consecutivas, una en casa contra la Real Sociedad y otra ante el vigente campeón en su casa, en ambas no consiguió marcar, así que el partido de ayer se le presentaba como una buena manera de refrendar su camino en la competición y darle una alegría a su afición, que tantos calvarios les están tocando vivir. Por su parte, el conjunto gallego llegaba a la capital de España con el firme deseo de salir de la quema, puesto que, con 26 puntos, marca la salvación en primera división a los 3 inmersos en la zona de descenso. Para intentar aprovechar los pinchazos de los equipos en la zona de descenso, todos perdieron en la jornada sabatina y el Granada había sido apabullado en el Bernabéu durante la matinal del Domingo, pues era una oportunidad de abrir hueco con las respectivas posiciones de descenso. Una oportunidad perdida, otra más, por los hombres de Víctor Fernández.
La primera parte sólo tuvo un color, el azulón de la camiseta del Getafe, que se encargó desde el minuto uno de poner en cerco la portería defendida por Fabricio, que atajaba como podía y su defensa los ataques del conjunto local. Pero la defensa del Deportivo no se caracteriza precisamente por ser consistente ni fiable, pues la pareja Sidney- Insua fue un auténtico coladero junto con los laterales, Laure y Luisinho. Por ahí canalizó el Getafe todo su arsenal, que con las incursiones de Diego Castro y Pedro León y bajo la dirección de Pablito Sarabia, ponían en jaque a la defensa gallega. Y poco tardó el Getafe en marcar el primero, en un saque de esquina que sacó desde la parte izquierda Sarabia, ni la defensa del Depor consigue despejar ni el ataque del Getafe marcar, pero un balón que queda muerto en la frontal es introducido por Velázquez para que, el ayer lateral derecho, Alexis Sánchez, aprovechase el despeje en la mala salida del guardameta y consiga inaugurar el marcador para el conjunto azulón. Primer cuarto de hora ( minuto 17) y el Getafe ya mandaba en el partido, y el Deportivo ya tenía que ir contra corriente.
La primera parte continuó igual, el Getafe más tranquilo por su gol conseguido pronto, se sentía espoleado por el público para intentar cerrar el choque antes del descanso, Y es que cuando tu rival no da síntomas de querer entrar en la pelea, tienes que intentar asestar un golpe definitivo para que luego no te cueste el partido en los segundos 45 minutos.
Dicho y hecho, Y el Getafe lo llevó a la práctica, continuó sin levantar el pie del acelerador, y en una de esas jugadas, llegó un nuevo despiste de la zaga gallega, que repito, no tuvo su día, y no fue capaz de neutralizar el segundo gol del equipo local.
Una jugada por banda entre Pedro León y Sarabia acabó con el balón en el área gallega, que ni la defensa ni el portero consiguieron despejar y apareció el más listo de la clase, que fue Diego Castro, para llevarse el esférico, dejarlo atrás para que Sarabia con su visión de juego rápido y veloz viese la llegada SÓLO de Sergio Escudero, repito SÓLO, y el lateral izquierdo sin oposición batió las mayas de la portería del Deportivo. Un fiasco defensivo y un aluvión de fútbol sin enamorar que sirvió al Getafe para un poco más de la media hora de partido, colocarse 2-0 en el marcador.
Si el Depor pretendía comenzar la remontada en el Coliseum. desde luego con la imagen de la primera parte no va a ningún sitio. Más tarde, en rueda de prensa, su entrenador declaró " que habían tirado los primeros 45 minutos" y cuando te encuentras en una situación de lucha permanente por evitar los puestos de descenso, no puedes regalar ni el aliento a tu rival. Descanso en el Coliseum y 2-0, partido relativamente controlado por el Getafe que si no quería sustos tendría que haber sentenciado en la segunda mitad.
El gol de Escudero puso el 2-0 en el luminoso.
En la segunda parte. la regañina de Víctor, el pundonor de los gallegos y el coraje por los aficionados desplazados hasta la capital, harían que el Depor mejorase, eso, y las permutas realizadas por el técnico gallego, que sacó del terreno de juego a Fariña y Juanfran e introdujo a Toché e Isaac Cuenca, que junto a la velocidad y verticalidad de Lucas Pérez y el remate de Oriol, llevaron más peligro al arco de Vicente Guaita. Tambíén fue introducido Cavaleiro, que se especulaba con su titularidad, pero finalmente fue Juanfran quien ocupó su banda, pero el caboverdiano tuvo que abandonar a los 20 minutos de ser inmerso en el césped.
El Depor lo intentó, pero, lo que se habla siempre en la capital coruñesa es de esa falta de gol que tiene el equipo gallego, que sí, que puede hacer buenos partidos, que llegar llega, que crear crea pero no remata ni acaba finiquitando las jugadas con éxito.
Tuvo que ser en el minuto 78 cuando una de tantas incursiones por banda izquierda de Cuenca acabase con un remate en la posición del primer palo, de 9, de Toché, para batir por raso a Vicente Guaita. El Depor se metía en el partido, quizás sin tiempo, pero se metía con el gol del delantero murciano. Ante la ofensiva gallega, Pablo Franco tuvo que reordenar a sus hombres, e introdujo en el campo a Freddy, Naldo y el canterano Felip, sustituyendo a Sarabia, Alexis y Pedro León.
Para ganar seguridad y consistencia atrás, e intentar matar el partido a la contra, pues el fondo de armario del conjunto azulón es limitado, igual que la duración de la gasolina de sus hombres. El Coliseum se impacientaba con la tardanza del final del choque, pero en ningún momento el Deportivo tuvo una clara que pudiera inquietar a Vicente Guaita, jugaban con corazón pero sin cabeza, quizás haber salido así en la primera parte les hubiera dado un impulso más en el partido y no haber perdido una posibilidad real en una final por salir de la quema.
El final llegó y con él la explosión de jubilo de los aficionados getafenses, que vuelven a ver ganar a su equipo en casa, ante un rival directo, y que respiran más tranquilos en relación a las jornadas venideras. Por contra, los gallegos se sentían tristes, pues habían tirado la primera parte y en la segunda fueron incapaces de nivelar la contienda.
En definitiva, un choque que deja al Getafe a 9 del descenso, respirando más tranquilo, y al Depor coqueteando con esa posición de quema, que ahora mismo ocupa el Granada. A ver si para la próxima cita CRUCIAL de este miércoles en Riazor contra el Córdoba sirve a los gallegos para darse cuenta de que los partido empiezan en el minuto 1, no cuando te han metido 2 goles en contra. El Getafe jugará en Elche, ante otro rival que también se está jugando la vida y que no atraviesa por su mejor momento institucional. Veremos que nos depara la jornada intersemanal.
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