Por Luis Vega Castillo (@Luisletal)
Partidazo. Espectáculo tanto táctico como técnico por parte de los jugadores y de ambos entrenadores el que nos ha brindado este Málaga - Atlético. Amrabat, Koke, Samu, Juanmi, Griezmann... y no menos importantes Javi Gracia y Diego Pablo Simeone, reparto de lujo para unos 90 minutos de fantasía.
Empate a dos, un punto que sabe a poco a ambos equipos teniendo en cuenta el esfuerzo que se dejaron en el campo, intercambiandose constantemente la iniciativa del encuentro entre los dos. Cuando parecía que uno de los dos equipos perdía el control del lance en detrimento del rival, una sustitución o algún destello de calidad de los jugadores más sobresalientes devolvía el agua a su cauce. Continuo intercambio de papeles en un partido muy entretenido.
Empezaba el encuentro con los dos conjuntos midiéndose, más pendientes de no cometer algún error fatal que de aventurarse en busca del gol. Pocos espacios, presión asfixiante y posesión compartida sin un claro dominador. Ambas defensas estuvieron expeditivas en lo táctico, sin arriesgar nada y alejando el balón lo más rápido posible de su área.
Poco a poco el Atlético, por medio de un soberbio Koke y el siempre acertado Griezmann, comenzó a tener algo más el control del balón en campo del Málaga. Y llegando al ecuador de la primera parte Jesús Gámez sacó de banda con la potencia de Hércules, poniéndola en el área donde Kameni, muy confiado, la pifió y dejó que el esférico se le escapase de las manos cuando saltó a recogerlo. Llegó Griezmann oportunista como de costumbre y puso el 1 a 0 en el marcador simplemente empujando el balón muerto. No sería su único gol del partido.
Se enrabietó el conjunto local que supo sobreponerse al intento del Atlético de congelar el partido y evitar el segundo mediante la genial actuación de Amrabat y de Samuel García que poco a poco se hicieron con el control del encuentro, provocando con sus llegadas varios saques de esquina todos ellos cargados de peligro.
Y en uno de ellos, la botó Recio al primer palo donde la buscaba Amrabat, pero finalmente fue Fernando Torres, quien intentando despejar batió a su portero Oblak. Empate justo antes del descanso. La segunda parte sería otra cosa totalmente distinta desde el comienzo.
Sin cambios volvieron las dos escuadras al verde, pero el partido si que estuvo plagado de cambios. Desde el primer minuto de la segunda mitad ambos equipos se lanzaron a por la victoria, se rompió la asfixiante presión y empezaron a aparecer espacios que permitieron a jugadores como Griezmann, Arda, Juanmi o Amrabat explotar sus cualidades con el balón en los pies.
Rozó el Atlético el segundo por medio de un Torres que intentaba resarcirse de su error, primero tras un remate de cabeza y segundo tras empalar un centro de Juanfran que había bajado el Niño a las mil maravillas con el pecho. Ambas ocasiones las solventó Kameni que también se quitó la espinita de su fallo en el primer gol Atlético.
Tras el susto inicial, el Málaga con toda su juventud y desparpajo se echó adelante, destacando el lateral Boka que dejó algunas subidas y regates realmente de superclase poniendo en apuros a la zaga Atlética, como si esta no tuviese suficiente ya con el incansable Amrabat, participe en todas las jugadas de peligro malaguistas.
En una de ellas supo aguantar el balón de espaldas en la frontal del área atlética y con algo de suerte, el balón fue hacia Samuel que ante la rápida salida de Oblak resolvió como un veterano. Picadita para la Moviola y golazo. 2-1 remontaba el cuadro de Javi Gracia.
Pero ya hemos dicho que el partido sería un ir y venir, y cuando parecía que el Málaga tenía todo rodado, El Cholo movió el banquillo, sustituyó al instante a Torres y al amonestado Gabi por Saúl y el mejicano Raúl Jiménez. Ambos fueron un soplo de aire fresco. Volvió el Atlético a coger las riendas del encuentro con un Koke en sala de máquinas magistral, empezó a aparecer Arda, y Juanfran volvió a ser el extremo de Osasuna. El Málaga se encerró durante unos minutos que le costaron la victoria.
Balón colgado al centro del área rival al que Jiménez respondió con una acción de delantero centro de libro. La bajó de cabeza para que el 7 galo batiese a Kameni con su clase habitual. Nada pudo hacer el guardameta. Protestó mucho el Málaga un posible fuera de juego del delantero rojiblanco, pero no lo había. Empate a dos. Otro de Antoine, ya van 18 y que siga la fiesta del francés.
A pesar del empate ninguno de los dos equipos estaba contento y se lanzaron a por la victoria. Y apunto estuvieron ambos de conseguirla, primero el Atlético que tras un centro alto de Juanfran vio de nuevo como Raul Jiménez la bajó y la dejó atrás para la entrada de Saúl a la que respondió Kameni con un paradón. Y más tarde Amrabat se sacaría un disparo imposible a la media vuelta desde fuera del área que obligó a Oblak a una estirada espectacular.
Murió al máximo nivel uno de esos partidos que nunca quieres que terminen seas del equipo que seas. Se queda el Atlético tercero independientemente de lo que haga el Valencia El Málaga mantendrá su séptima posición.
Partidazo. Espectáculo tanto táctico como técnico por parte de los jugadores y de ambos entrenadores el que nos ha brindado este Málaga - Atlético. Amrabat, Koke, Samu, Juanmi, Griezmann... y no menos importantes Javi Gracia y Diego Pablo Simeone, reparto de lujo para unos 90 minutos de fantasía.
Empate a dos, un punto que sabe a poco a ambos equipos teniendo en cuenta el esfuerzo que se dejaron en el campo, intercambiandose constantemente la iniciativa del encuentro entre los dos. Cuando parecía que uno de los dos equipos perdía el control del lance en detrimento del rival, una sustitución o algún destello de calidad de los jugadores más sobresalientes devolvía el agua a su cauce. Continuo intercambio de papeles en un partido muy entretenido. Empezaba el encuentro con los dos conjuntos midiéndose, más pendientes de no cometer algún error fatal que de aventurarse en busca del gol. Pocos espacios, presión asfixiante y posesión compartida sin un claro dominador. Ambas defensas estuvieron expeditivas en lo táctico, sin arriesgar nada y alejando el balón lo más rápido posible de su área.
Poco a poco el Atlético, por medio de un soberbio Koke y el siempre acertado Griezmann, comenzó a tener algo más el control del balón en campo del Málaga. Y llegando al ecuador de la primera parte Jesús Gámez sacó de banda con la potencia de Hércules, poniéndola en el área donde Kameni, muy confiado, la pifió y dejó que el esférico se le escapase de las manos cuando saltó a recogerlo. Llegó Griezmann oportunista como de costumbre y puso el 1 a 0 en el marcador simplemente empujando el balón muerto. No sería su único gol del partido.
Se enrabietó el conjunto local que supo sobreponerse al intento del Atlético de congelar el partido y evitar el segundo mediante la genial actuación de Amrabat y de Samuel García que poco a poco se hicieron con el control del encuentro, provocando con sus llegadas varios saques de esquina todos ellos cargados de peligro.
Y en uno de ellos, la botó Recio al primer palo donde la buscaba Amrabat, pero finalmente fue Fernando Torres, quien intentando despejar batió a su portero Oblak. Empate justo antes del descanso. La segunda parte sería otra cosa totalmente distinta desde el comienzo.
Sin cambios volvieron las dos escuadras al verde, pero el partido si que estuvo plagado de cambios. Desde el primer minuto de la segunda mitad ambos equipos se lanzaron a por la victoria, se rompió la asfixiante presión y empezaron a aparecer espacios que permitieron a jugadores como Griezmann, Arda, Juanmi o Amrabat explotar sus cualidades con el balón en los pies.
Rozó el Atlético el segundo por medio de un Torres que intentaba resarcirse de su error, primero tras un remate de cabeza y segundo tras empalar un centro de Juanfran que había bajado el Niño a las mil maravillas con el pecho. Ambas ocasiones las solventó Kameni que también se quitó la espinita de su fallo en el primer gol Atlético.
Tras el susto inicial, el Málaga con toda su juventud y desparpajo se echó adelante, destacando el lateral Boka que dejó algunas subidas y regates realmente de superclase poniendo en apuros a la zaga Atlética, como si esta no tuviese suficiente ya con el incansable Amrabat, participe en todas las jugadas de peligro malaguistas.
En una de ellas supo aguantar el balón de espaldas en la frontal del área atlética y con algo de suerte, el balón fue hacia Samuel que ante la rápida salida de Oblak resolvió como un veterano. Picadita para la Moviola y golazo. 2-1 remontaba el cuadro de Javi Gracia.
Pero ya hemos dicho que el partido sería un ir y venir, y cuando parecía que el Málaga tenía todo rodado, El Cholo movió el banquillo, sustituyó al instante a Torres y al amonestado Gabi por Saúl y el mejicano Raúl Jiménez. Ambos fueron un soplo de aire fresco. Volvió el Atlético a coger las riendas del encuentro con un Koke en sala de máquinas magistral, empezó a aparecer Arda, y Juanfran volvió a ser el extremo de Osasuna. El Málaga se encerró durante unos minutos que le costaron la victoria.
Balón colgado al centro del área rival al que Jiménez respondió con una acción de delantero centro de libro. La bajó de cabeza para que el 7 galo batiese a Kameni con su clase habitual. Nada pudo hacer el guardameta. Protestó mucho el Málaga un posible fuera de juego del delantero rojiblanco, pero no lo había. Empate a dos. Otro de Antoine, ya van 18 y que siga la fiesta del francés.
A pesar del empate ninguno de los dos equipos estaba contento y se lanzaron a por la victoria. Y apunto estuvieron ambos de conseguirla, primero el Atlético que tras un centro alto de Juanfran vio de nuevo como Raul Jiménez la bajó y la dejó atrás para la entrada de Saúl a la que respondió Kameni con un paradón. Y más tarde Amrabat se sacaría un disparo imposible a la media vuelta desde fuera del área que obligó a Oblak a una estirada espectacular.
Murió al máximo nivel uno de esos partidos que nunca quieres que terminen seas del equipo que seas. Se queda el Atlético tercero independientemente de lo que haga el Valencia El Málaga mantendrá su séptima posición.
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