Bayern München 1-0 Bayer 04: Golpe de autoridad

Por Nizar Sadellah (@Hohenheim77)

El partido de la jornada en la Bundesliga, y probablemente en Europa, veía enfrentarse el todopoderoso Bayern y el Bayer Leverkusen. Guerrilla fútbol vs. Tiki-Taka 2.0 o Roger Schmidt vs. Pep Guardiola. En una entrevista previa al partido, el ahora técnico del Leverkusen zanjaba la polémica de su victoria por 3-0 contra el Bayern de Guardiola en un amistoso en enero, cuando era técnico del Red Bull Salzburg. El partido de hoy no tenía nada que ver. También no dio más leña al tema Kießling y su cifra de goles relativamente baja esta temporada. La verdad es que en el equipo de Schmidt, Kießling trabaja mucho más para el equipo y no necesita marcar tanto, porque ya se encargan de meter Bellarabi o Son. En esto sí son bastante similares los dos conjuntos, ya que en el Bayern de Guardiola Lewandowski tampoco es la maquina de goles que fue en las temporadas anteriores con el Dortmund. Otro técnico, otras tareas.

Los dos equipos saltaban al campo con su once de gala, considerando todas las bajas de Bayern obviamente. Están lesionados Lahm, Alaba, Thiago, Javi Martínez, Badstuber, Pizarro, Reina y Starke, con la que parece un milagro que Guardiola pueda alinear un once competitivo, pero la profundidad de banquillo es una de la fuerza del Bayern. Sólo rotaba a Benatia por Dante, en lo que viene siendo un cambio habitual. El Bayer Leverkusen recuperaba al turco Toprak en el eje de la zaga, y Schmidt le dio la titularidad al joven lateral Wendell, en otra clásica rotación esta temporada.

Empezaba el partido en el fortín de Múnich, pues el Bayern ha perdido sólo uno de los últimos 36 que ha jugado en el Allianz Arena. Pero el Bayer 04 no tardó ni 3 minutos en poner en apuros al local. Un intento de despeje de Boateng rebotaba en un compañero y le permitía a Bellarabi hacer muestra de su tremenda velocidad para presentarse sólo ante Manuel Neuer. El nuevo internacional alemán, de origen marroquí, batió el nominado al balón de oro con una pelota picada, pero un gran repliegue de Juan Bernat le permitió despejar en la misma linea de gol. Primer susto para los locales y un aviso de que este partido iba a necesitar que estén todos muy concentrados y con una intensidad máxima.

A los 7 minutos, un pase sin mirar de Hakan Çalhanoğlu (el nuevo Özil) encontraba a Son a la espalda de Boateng. El coreano llegó hacia la linea de fondo y puso un centro raso hacia el punto de penalti pero Kießling llegaba tarde para rematar.

El partido era muy táctico, con un Leverkusen defendiendo muy lejos de su portería y imponiendo un tempo y un pressing muy agresivo a los hombres de Guardiola, para recuperar la pelota lo más alto posible y lanzar contras rapidísimas. El Bayern movía la pelota con velocidad y criterio, abusando de los cambios de juego para hacer correr al rival e intentar encontrar espacios, sobre todo a espaldas de sus laterales.

Al hilo de la media hora de juego, otra buena contra del Leverkusen veía como Kießling se escapaba de su marcador por la banda derecha, al límite del fuera de juego. El delantero centró para Çalhanoğlu pero sin la suficiente precisión para que llegase a ser peligroso.

El Bayern conseguía crear peligro notable a los 40 minutos de juego, cuando se anuló bien un gol a Robben. El extremo holandés voleaba al fondo de la red un despeje del portero Leno, pero este último había recibido un contacto ilegal en el aire por parte de Lewandowski.

Se llegó al descanso con las tablas en el marcador. Guardiola tomó nota del pobre partido de Götze y Lewa, ambos poco participativos. Decidió mover ficha y dar entrada al joven Sebastian Rode por el duende alemán. Este cambio iba a cambiar la fisionomía del partido. Rode se colocó al lado de Xabi Alonso, impulsando una serie de cambios tácticos, que veían a Müller moverse más hacia la banda derecha y a Robben en la posición de 10, por detrás del punta. Este cambio iba a darle mucho más control al Bayern, perdiendo menos pelotas y construyendo con más eficiencia jugadas ofensivas de peligro.

El minuto 50 marcaba el principio de una oleada ofensivas del FCB que empezaría con el gol pero que iba a durar más de 10 minutos.

En una internada de Robben por el costado derecho, Leverkusen defendió bien, consiguiendo recuperar el dominio de la pelota. Pero fueron demasiado lentos en el intento de despeje y una gran intensidad de Rode en la presión le permitió robar el balón y obtener un saque de esquina. Robben lo jugó en corto, con Rafinha, y el brasileño puso un buen centro al área. Un remate de cabeza de Xabi Alonso encontraba a Ribéry quién encontró el gol de volea directa. Era el gol número 100 de Ribéry con el Bayern, en su partido 186 en Bundesliga. Ambos son récords para él, ya que ningún francés había alcanzado esas marcas en la liga teutona. Era también el primer gol de los bávaros en Bundesliga esta temporada, después de 110 intentos.

El Bayern tuvo un par de oportunidades más después del gol, con un Leverkusen ligeramente noqueado, pero ninguna como la que falló Lewandowski. Xabi Alonso jugó rápido una falta en campo propio y lanzó al atacante polaco sólo por el costado derecho, de donde vinieron más del 50% de los ataques bávaros. Lewa quiso ser altruista y centró hacia el punto de penalti, donde esperaba Müller. Pero el jovencísimo lateral croata del Leverkusen, Tin Jedvaj, se anticipó al pilló alemán para impedir que rematara. El rechace le cayó justo al polaco, a 2 metros del gol. Controló y voleó en un movimiento de gran clase...pero su disparo acabo increíblemente en el lateral de la red.

El Bayern controló el resto del encuentro, y el tradicional baile de cambios entre el minuto 60 y el final del partido no tuvo mucho impacto sobre el resto del encuentro. El Bayer 04 no tuvo ni una sola oportunidad de gol en la segunda parte.

Esta vez, Pep se llevaba la victoria, y esta vez no era un amistoso. El cambio de Rode se reveló clave para domar al impetuoso equipo de Roger Schmidt. El Bayer sigue apuntando maneras y sigue teniendo opciones de pelear el segundo puesto con los Wolfsburg, 'Gladbach y Schalke. El primer puesto está prometido a los bávaros, salvo sorpresón mayúsculo.