Por Nizar Sadellah
Había un ambientazo en el Borussia-Park. Ya no sólo porque el equipo local, segundo, se enfrentaba al cuarto en un de los partidos más atractivos de la jornada (con permiso del Bayern - BVB) pero también porque su técnico celebraba su 57 cumpleaños. Lucien Favre presentaba su decimoséptima alineación en 17 partidos esta temporada, en otra muestra de la profundidad de banquillo de su equipo y de la flexibilidad de su plantilla (10 goleadores diferentes esta temporada). Definitivamente uno de los combinados mejor trabajados de Europa.
Por su parte, Markus Gisdol introducía por segunda vez consecutiva (después de haberlo hecho en Copa) a Zuber por Kevin Volland en su linea de ataque. El helvético, procedente del CSKA de Moscú, tiene la ventaja de ofrecer una mejor cobertura defensiva de la banda derecha que el ya internacional absoluto teutón.
Encaró el partido de maravilla el local y sólo necesitó 12 minutos para ponerse por delante en el marcador. En una ataque conducido a una velocidad endiablada, ya marca de la casa, combinaron Raffael, Kramer y Hermann al primer toque para que este último pudiese centrar hacia André Hahn, quien remataba a placer desde el punto de penalti con una volea contra la que no pudo nada Baumann, el portero del Hoffenheim.
Eso era lo que necesitaba el conjunto visitante para despertar. Pues hasta el momento no había hecho mucho ofensivamente. Empezó a tomar el juego por su cuenta, dominando la posesión y esto no parecía importarle mucho al Gladbach. El equipo de Gisdol tuvo varias opciones de empatar el partido, pero todas acabaron con sus delanteros en fuera de juego. En una jugada espectacular, Elyounoussi (en fuera de juego) remataba de cabeza dos veces seguidas al palo. El internacional noruego nacido en Marruecos ha impresionando bastante en este arranque de la Bundesliga.
El 1-1 iba a llegar por Modeste, que esta vez sí se encontraba en posición reglamentaria. Después de una buena combinación en la frontal del área de los hombres de ataque (Firmino, Elyounoussi y Zuber), el delantero francés definió fuerte y abajo, dejando pocas opciones al arquero Yann Sommer. Batirle al ex del Basilea en la Bundesliga son palabras mayores, ya que el suizo tiene le mejor ratio de la Bundesliga con 90% de paradas.
Este resultado lo aguantó el Hoffenheim unos tres minutos. En una jugada ensayada, a la salida de un saque de esquina, el Gladbach movió la pelota de una lado a otro del área, para que Stranzl encontrase a André Hahn por el costado derecho. Éste le puso un centro raso al primer palo a Hermann, que se adelantó a una defensa muy pasiva para poner el 2-1. Se intercambiaban los puestos de goleador y asistente André Hahn y Patrick Hermann, firmando ambos una grande actuación en la primera parte.
Al volver del vestuario, intentó cambiar la dinámica Gisdol, introduciendo al gigante Vestergaard por Zuber, sacrificando a uno de los hombres de ataque para poner más personal en el centro del campo, con la idea de dificultar la creación del juego del rival.
No le salió la jugada ya que el Borussia empezó el segundo tiempo mejor aun que el primero. Los hombres de ataque, entre los cuales Max Kruse, pusieron a prueba más de una vez a Baumann.
El tercer gol cayó a los 5 minutos de la reanudación, cuando Patrick Hermann empujó en el fundo de las mallas un despeje demasiado centrado de Baumann, después de una falta tirada con mucha potencia por Nordtveit. El centrocampista noruego ocupaba el puesto de Granit Xhaka, baja por la lesión de tobillo que sufrió contra el Bayern.
El resultado pudo ser más abultado, mientras el resto del partido seguía el guión escrito por Favre, dejando la posesión al Hoffenheim y procediendo en contras demoledoras.
Al final, el técnico suizo obtuvo su premio, y su racha de invencibilidad sigue intacta. La que se termina es la del Hoffenheim, aunque ambos equipos acaban la jornada sin cambios en la tabla clasificatoria y siguen soñando con la posibilidad de jugar la Champions la próxima temporada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario