Victoria para redondear una gran temporada

Por Jon Fernández (@Mur_98)

El Liverpool remontó en Anfield un gol en contra del Newcastle  y acabó ganando un duelo que se había convertido en intrascendente por la victoria del Manchester City ante el West Ham por 2-0 que dio la Premier a los citizens. Los reds conservaban opciones de conquistar la liga inglesa 24 años después de su último título si los de Manuel Pellegrini perdían en el último partido de la temporada, pero tuvieron que conformarse con el segundo puesto
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Agger realizó un remate acrobático

El eslovaco Martin Skrtel anotó en propia puerta un gol que subió al marcador del Newcastle en el minuto 20 y que el Liverpool, desanimado por el resultado del City, no supo contrarrestar hasta bien entrado el segundo tiempo. Lo hizo en dos minutos, con goles del danés Daniel Agger y el inglés Daniel Sturridge, los en dos minutos prácticamente seguidos mediada la segunda mitad.

El técnico Brendan Rodgers sabía que la liga era un objetivo prácticamente inalcanzable antes de empezar, pero no quiso darse por vencido y plantó sobre el campo a un equipo atacante, con Sturridge y Suárez en punta; y Henderson, que volvía tras su sanción, junto a Gerrard y Allen en el medio campo. Coutinho fue el elegido para quedarse en el banquillo.

Con la vista puesta en el partido del Etihad, que se disputaba al mismo tiempo que el de Anfield, los reds salieron al ataque ante un Newcastle ya sin posibilidades de entrar esta temporada en Europa. A pesar de que no se jugaban nada, los de Alan Pardew llegaban a Liverpool dispuestos a plantar batalla, y en el minuto 20 vieron cómo uno de sus ataques terminaba con el balón en la red debido a, como ya hemos dicho, un error del defensa Martin Skrtel. El francés Yoan Gouffran sobrepasó por la izquierda a Steven Gerrard y envió un centro potente que el eslovaco trató de desviar pero que acabó mandando al interior de su propia portería.

El sentimiento general era agridulce en Anfield

Con esa desventaja inesperada en el marcador, la tarea del Liverpool se presentaba titánica. Los de Rodgers debían remontar el gol en contra del Newcastle y esperar a que el City, que en ese momento empataba a cero ante el West Ham, perdiera en casa esta tarde. Las dificultades no hicieron que los locales dejaran de atacar, y apenas cinco minutos después tuvieron ocasión de empatar con un cabezazo de Agger que detuvo el portero holandés Tim Krul. El uruguayo Luis Suárez, máximo goleador de la Premier esta temporada con 31 tantos, también fabricó ocasiones en el primer tiempo, la mejor de ellas en el minuto 33: Una jugada personal en la que esquivó a tres defensas en el área para lanzar un tiro potente que también acabó salvando Krul. Con el 0-1 se llegó al descanso en Anfield.


No fue hasta los veinte minutos del segundo tiempo cuando los ataques de los reds dieron frutos. En dos minutos, los de Rodgers le dieron la vuelta al partido. Agger empató tras aprovechar una asistencia de Gerrard, y luego este mismo dio un pase a Daniel Sturridge para que sellara el 2-1 apenas dos minutos después, ante un Newcastle que se quedaba con diez por la expulsión de Ameobi, que algo grave debió decirle al colegiado. Las dos jugadas de los tantos fueron prácticamente idénticas. A partir de ahí, comenzaron a llegar noticias negativas desde Manchester. Los de Pardew apenas crearon peligro, ya que estaban con diez, y sin mucho más reseñable finalizó el encuentro. Justo antes de la conclusión fue expulsado Dummett tras una durísima entrada sobre Suárez.

El Liverpool de Rodgers puso así un broche de plata a esta temporada en la que, finalmente, la Premier se ha vuelto a escapar. Sin embargo, la vuelta a Champions League por la puerta grande tras varios años sin que esta pasase por Anfield mantiene la ilusión de los aficionados. Sonó el YNWA y los futbolistas dieron su merecidísma vuelta de honor. El objetivo inicial, entrar en la Liga de Campeones, ha sido cumplido con creces, y el segundo puesto se antojaba inalcanzable en agosto. La paciencia le está dando la razón a Rodgers, y si nadie se marcha y llega algún refuerzo, volverán, esta vez sí, a por la Premier.