lunes, 5 de mayo de 2014

Una jornada atípica

Por Jon Fernández (@Mur_98)

Es muy raro encontrar una jornada en la que ninguno de los tres primeros equipos de la Liga BBVA logre los tres puntos. Sin embargo, ya en mayo, con la Liga en juego, nos ha tocado vivir esta situación. El Barcelona empató en casa ante un necesitado Getafe, el Atlético perdió en un campo complicado como el Ciutat de Valencia y el Real Madrid no consiguió más de un punto -y eso que logro poner las tablas en el luminoso en el 92´- contra el Valencia, que venía de caer eliminado sobre la bocina en las semifinales de la Europa League.

Celebración de un gol por parte de los jugadores del Barça
Por orden cronológico, el primero en pinchar fue el Barcelona. Dijo virtualmente adiós a la Liga con este empate ante el Getafe, pero habría dependido de sí mismo para llevarse el campeonato si Cristiano no llega a marcar de espuela en el descuento. El choque comenzó favorable para los del Tata Martino. Messi adelanto a los 23 minutos de juego a los locales, pero antes del descanso Lafita logró el 1-1 para poner nervioso a un Camp Nou que está comenzando a acostumbrarse a las decepciones de su equipo. Mediada la segunda parte, Alexis anotó para volver a poner por delante al Barça. Sin embargo, los dirigidos por Cosmin Contra estaban ansiosos por puntuar y, finalmente, lo lograron gracias a otro tanto de Lafita. Todo el mundo se reía entonces de un Barça que veía la Liga imposible pese a que Martino defendió la temporada de su equipo en rueda de prensa.

El domingo millares de aficionados colchoneros invadieron Valencia. El ambiente era perfecto. Sin embargo, no es agradable para nadie jugarse la Liga ante un equipo de Joaquín Caparrós, a pesar de que sus jugadores no se jueguen nada. El utrerano, técnico orgulloso donde los haya, no iba a dejar una oportunidad como esta. Para él esto era una magnífica ocasión de tener repercusión, decidiendo la Liga al quitar puntos a uno de los contendientes. Y Jokin -apodo que se ganó en Bilbao- no falló. Su Levante, conjunto correoso ante todo, venció por 2-0 al cuadro de Simeone gracias a los tantos de Filipe Luis en propia puerta y David Barral. El Atlético no mereció tanto castigo; de hecho, dominó con mucha claridad en el arranque del segundo tiempo, pero un imbatible Keylor Navas mostró una vez más el gran portero que es. Por tanto, la Liga seguía en manos colchoneras mas sin margen respecto al Real Madrid.

Los colchoneros aplaudieron a su afición tras la derrota
Pero por la noche, una nueva sorpresa llegaría: El Valencia, que se presentó tocado anímicamente en el Bernabeú, se adelantaba con un gol de Jeremy Mathieu al filo del descanso. Sergio Ramos lograría a falta de media hora el empate, pero Parejo volvió a colocar por delante a los de Pizzi. Hay que destacar el partidazo que hizo Diego Alves, que mantuvo a raya a Cristiano hasta que en el descuento el crack portugués marcó de espuela para lograr la igualada. No hubo tiempo para más, y los chés, que no se jugaban nada más que la honra, se llevaron un valioso y complicado punto de la capital. Ese punto rescatado a última hora por Cristiano puede ser clave para el desenlace del campeonato, ya que el Barça sigue sin depender de sí mismo -necesita ganar todo y un pinchazo, bien sea empate o derrota, del Real Madrid. En cuanto al Atlético, le valdría con ganar un encuentro y empatar el otro para llevarse el título; mientras que el Real Madrid, aun ganando todo, necesitaría una derrota de los colchoneros.

Estas son las cuentas de la Liga más bonita de los últimos años. Tres equipos son candidatos, y todos ellos llegarían con opciones a la última jornada de ganar los encuentros que les restan hasta esa fecha (al Real Madrid dos y a Atlético y Barça uno). Al haber un Barcelona-Atlético en la 38ª jornada, todo es posible, y ese duelo apunta a ser apoteósico si todos llegan con opciones de llevarse el título.

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