viernes, 28 de marzo de 2014

Seguir soñando

Por Pablo Fuste (@pablo_fuste)

El que veis en el título era el objetivo de los reds ayer, seguir soñando. El Liverpool sigue empeñado en dar la campanada en la Premier League, y, para ello, seguramente deba vencer todos sus choques. Ayer ganó al Sunderland de Poyet por 2-1 y pese a sufrir más de los esperado, dejó claro que luchará con Chelsea y Manchester City por el título.

Aún así, el Sunderland, que sigue en descenso, no se amedrentó y vendió cara su derrota. Los dirigidos por Poyet se encerraron atrás desde el principio, llegando a acumular hasta ocho hombres visitantes en el área de Mannone. Lo que querían hacer estaba claro, no dejar ni un solo hueco para que Suárez, Sturridge y compañía volaran al contraataque. Por esto, a los reds les costó abrir la lata. Steven Gerrard marcó de falta antes del descanso con un potente disparo (es cierto que la barrera estaba fuera de lugar) y Sturridge encarriló la victoria justo después con un bonito tiro colocado muy complicado para el arquero del Sunderland.

Steven Gerrard lanzó la falta para lograr el primer tanto del Liverpool

El encuentro tuvo un momento en el que el 3-0 parecía cerca, pero la entrada de Ki cambió el partido totalmente. El coreano hizo un gran choque y lideró el intento de remontada visitante en Anfield. El Liverppol dejó de dominar, y el 2-1 era inminente, hasta que el propio Ki a falta de 15 minutos a la salida de un córner mantuvo la emoción hasta el final. Los de Brendan Rodgers sufrieron pero supieron aguantar con entereza las ofensivas rivales.

No en vano, los reds están a solo un punto del liderato de los blues, suman siete victorias consecutivas, es el equipo más goleador de la Liga y tiene en sus filas a Luis Suárez, el mejor jugador del campeonato. Los de Pellegrini tienen dos partidos menos que los dos líderes de la clasificación y haciendo pleno en esos dos partidos se colocarían primeros. El Arsenal todavía no se ha descolgado del todo y Wenger lo sabe, pero para ello deben ganar este sábado al Manchester City. Habrá Premier League hasta el final, habrá espectáculo hasta el final.

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