Por Luis Vega Castillo (@Luisletal)
Empate a cero en Nervión entre el actual campeón de Liga y el coronado por la UEFA Europa League. Partido de esos que se llaman... ¿Táctico?
Si uno de los dos equipos puede irse "contento" ese fue el Atlético de Madrid tanto por lo visto en el campo, donde el Sevilla fue superior durante el grueso del encuentro como en la tabla clasificatoria. Se afianzan los del Cholo en la zona Champions siendo terceros a un solo punto del Valencia, pero ya a ocho del quinto que es el propio Sevilla. En fin, ya dijo Diego Pablo que su liga estaba aquí contra el Sevilla y el Valencia y para los que se lo creyeron y abandonaron la idea del milagro de la campaña pasada pueden estar contentos, otros no lo estamos y mas teniendo en cuenta el pinchazo de los Blancos ante el Villareal de Marcelino (Tremendo el submarino).
Y es que hay que decir que si uno de los equipos apostó por el dominio y la victoria desde el minuto uno ese fue el cuadro andaluz. El Sevilla comandado por un colosal Banega llevó el peso del partido durante toda la primera parte dominando un medio campo donde el trivote Atlético formado por Gabi, Tiago y Mario no dio sensación de confianza ni control en ningún momento. Mal momento el que atraviesan los mediocentros rojiblancos, sobre todo Gabi y Tiago, su bajada de nivel es mas que notable.
Destacó también en la primera parte el desparpajo de Aleix Vidal que entraba por banda derecha con mucha alegría dejando un par de acciones para enmarcar como un caño espectacular a Godín.
A pesar del dominio sevillista, la única acción de verdadero peligro fue un remate de Iborra ante un magnifico balón alto que puso Banega. La salida de Móya fue rápida y obligó al mediocentro hispalense a golpear a bocajarro estrellando el esférico en el poste. No volvería el Sevilla a tener ninguna parecida.
Se entonó entonces el Atlético pero la ausencia de un verdadero 9, pues Torres y Mandzukic estaban en el banco, obligaba a Griezmann y a Arda dos jugadores de puro talento, a perseguir pelotazos y balones en largo de esos que el turco no entiende.
La alta presión del Sevilla obligó al Atlético a rifar la mayoría de sus salidas de balón con desplazamientos elevados que con la ausencia de un 9 físico sirvieron de bien poco. Aún así tanto Móya como la defensa estuvieron geniales dentro del repliegue que propuso el Cholo para esta primera parte, llegando al descanso con empate a cero.
Comenzó el segundo tiempo con la misma idea por parte de los dos técnicos; Emery tendría el balón y el Cholo esperaría ahora que tenía a su defensa bien colocada y que Carlos Bacca parecía haberse diluido con el tiempo en la primera parte. Y todo siguió según lo previsto. Pocas opciones en el arranque, perdidas continuas ocho jugadores por metro cuadrado y presión intensa por parte de los dos conjuntos. Resultado: partido poco vistoso. Hasta que se produjeron los cambios.
El Cholo entendió que había que arriesgar y sustituyó a Arda que había estado perdido durante todo el encuentro por Fernando Torres. El Niño fue una alegría para los colchoneros. Salió inspirado y rapidísimo dejando un par de cabalgadas de esas que parecen de otra época. Se ve que esta recuperando el tono físico.
Emery pareció entender la idea del Cholo y sustituyó a Arribas que tenía amarilla por M'bia, para dejar a Krychowiak de central, el cual también tenía tarjeta. Cosa un tanto incomprensible y mas si tenemos en cuenta que el mediocentro se vio superado por el de Fuenlabrada en todo momento.
Muy cerca estuvo el Niño de asistir a Griezmann, pero el balón quedó un tanto atrasado y el francés no pudo impactar con contundencia. Se invertirían un poco después los papeles y sería el galo quien no conseguiría asistir a Torres con precisión, obligando al Niño a disparar forzadamente.
Emery apostó por cambios valientes y sustituyó a Coke por Reyes, pasando a Aleix al lateral derecho. El utrerano aportó desparpajo en los últimos metros de campo rival, pero parecía que el momento de ganar el partido había pasado para el Sevilla que a pesar de su dominio con el balón ya estaba mas preocupado de no recibir gol en una contra.
Entró también Koke por Gabi y Mandzukic por Griezmann el cual estaba fundido. La entrada del canterano a banda derecha permitió juego de asociación con Juanfran y Tiago lo que se tradujo en unos últimos minutos de ocasiones Atléticas.
Un buen robo de Torres al improvisado central Krychowiak por poco termina en gol pero el tiro se fue muy cruzado. También probó el disparo Mario Suárez desde la frontal pero fue centrado sin problemas para Rico.
Sustituyó Emery a Bacca por Gameiro para dar frescura a su ataque pero el encuentro murió finalmente entre las numerosas amarillas y el miedo de ambos equipos a encajar el gol de la derrota.
Empate a 0 que deja al Sevilla con mal sabor de boca y demuestra que el bache del Atlético lejos del Calderón continua pues sus últimas tres salidas han sido catastróficas. Recibirá la semana que viene al Valencia en el Calderón en un partido de importancia máxima.
Los de Nervión por su parte viajarán a Riazor con los ojos puestos en lo que ocurra en el Manzanares.
Empate a cero en Nervión entre el actual campeón de Liga y el coronado por la UEFA Europa League. Partido de esos que se llaman... ¿Táctico?
Si uno de los dos equipos puede irse "contento" ese fue el Atlético de Madrid tanto por lo visto en el campo, donde el Sevilla fue superior durante el grueso del encuentro como en la tabla clasificatoria. Se afianzan los del Cholo en la zona Champions siendo terceros a un solo punto del Valencia, pero ya a ocho del quinto que es el propio Sevilla. En fin, ya dijo Diego Pablo que su liga estaba aquí contra el Sevilla y el Valencia y para los que se lo creyeron y abandonaron la idea del milagro de la campaña pasada pueden estar contentos, otros no lo estamos y mas teniendo en cuenta el pinchazo de los Blancos ante el Villareal de Marcelino (Tremendo el submarino).
Y es que hay que decir que si uno de los equipos apostó por el dominio y la victoria desde el minuto uno ese fue el cuadro andaluz. El Sevilla comandado por un colosal Banega llevó el peso del partido durante toda la primera parte dominando un medio campo donde el trivote Atlético formado por Gabi, Tiago y Mario no dio sensación de confianza ni control en ningún momento. Mal momento el que atraviesan los mediocentros rojiblancos, sobre todo Gabi y Tiago, su bajada de nivel es mas que notable.
Destacó también en la primera parte el desparpajo de Aleix Vidal que entraba por banda derecha con mucha alegría dejando un par de acciones para enmarcar como un caño espectacular a Godín.
A pesar del dominio sevillista, la única acción de verdadero peligro fue un remate de Iborra ante un magnifico balón alto que puso Banega. La salida de Móya fue rápida y obligó al mediocentro hispalense a golpear a bocajarro estrellando el esférico en el poste. No volvería el Sevilla a tener ninguna parecida.
Se entonó entonces el Atlético pero la ausencia de un verdadero 9, pues Torres y Mandzukic estaban en el banco, obligaba a Griezmann y a Arda dos jugadores de puro talento, a perseguir pelotazos y balones en largo de esos que el turco no entiende.
La alta presión del Sevilla obligó al Atlético a rifar la mayoría de sus salidas de balón con desplazamientos elevados que con la ausencia de un 9 físico sirvieron de bien poco. Aún así tanto Móya como la defensa estuvieron geniales dentro del repliegue que propuso el Cholo para esta primera parte, llegando al descanso con empate a cero.
Comenzó el segundo tiempo con la misma idea por parte de los dos técnicos; Emery tendría el balón y el Cholo esperaría ahora que tenía a su defensa bien colocada y que Carlos Bacca parecía haberse diluido con el tiempo en la primera parte. Y todo siguió según lo previsto. Pocas opciones en el arranque, perdidas continuas ocho jugadores por metro cuadrado y presión intensa por parte de los dos conjuntos. Resultado: partido poco vistoso. Hasta que se produjeron los cambios.
El Cholo entendió que había que arriesgar y sustituyó a Arda que había estado perdido durante todo el encuentro por Fernando Torres. El Niño fue una alegría para los colchoneros. Salió inspirado y rapidísimo dejando un par de cabalgadas de esas que parecen de otra época. Se ve que esta recuperando el tono físico.
Emery pareció entender la idea del Cholo y sustituyó a Arribas que tenía amarilla por M'bia, para dejar a Krychowiak de central, el cual también tenía tarjeta. Cosa un tanto incomprensible y mas si tenemos en cuenta que el mediocentro se vio superado por el de Fuenlabrada en todo momento.
Muy cerca estuvo el Niño de asistir a Griezmann, pero el balón quedó un tanto atrasado y el francés no pudo impactar con contundencia. Se invertirían un poco después los papeles y sería el galo quien no conseguiría asistir a Torres con precisión, obligando al Niño a disparar forzadamente.
Emery apostó por cambios valientes y sustituyó a Coke por Reyes, pasando a Aleix al lateral derecho. El utrerano aportó desparpajo en los últimos metros de campo rival, pero parecía que el momento de ganar el partido había pasado para el Sevilla que a pesar de su dominio con el balón ya estaba mas preocupado de no recibir gol en una contra.
Entró también Koke por Gabi y Mandzukic por Griezmann el cual estaba fundido. La entrada del canterano a banda derecha permitió juego de asociación con Juanfran y Tiago lo que se tradujo en unos últimos minutos de ocasiones Atléticas.
Un buen robo de Torres al improvisado central Krychowiak por poco termina en gol pero el tiro se fue muy cruzado. También probó el disparo Mario Suárez desde la frontal pero fue centrado sin problemas para Rico.
Sustituyó Emery a Bacca por Gameiro para dar frescura a su ataque pero el encuentro murió finalmente entre las numerosas amarillas y el miedo de ambos equipos a encajar el gol de la derrota.
Empate a 0 que deja al Sevilla con mal sabor de boca y demuestra que el bache del Atlético lejos del Calderón continua pues sus últimas tres salidas han sido catastróficas. Recibirá la semana que viene al Valencia en el Calderón en un partido de importancia máxima.
Los de Nervión por su parte viajarán a Riazor con los ojos puestos en lo que ocurra en el Manzanares.
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