Por Jon Fernández (@Mur_98)
Berlín fue ayer testigo de la quinta Copa de Europa lograda por el Fútbol Club Barcelona. Los culés suman cuatro de las Champions de los últimos diez años, tiempo en el que ningún otro club ha sido capaz de repetir. La Juve fue un digno rival y plantó cara, pero la superioridad técnica de los catalanes decantó el choque a su favor.
No fue la noche de Messi, quizá tampoco la de Suárez o Neymar. La UEFA entregó a Iniesta el premio a mejor futbolista del torneo, aunque, realmente, ayer ganó el colectivo. No hubo nadie que destacara claramente por encima del resto. Aunque, si hubiera que elegir a alguien, podría decirse que la UEFA acertó con el manchego. Pero comencemos por el principio.
A las 20:45 saltaban al césped del majestuoso Olympiastadion de Berlín los jugadores de ambos equipos. Allegri y Luis Enrique salieron con el once de gala, a excepción de Chiellini, que se vio sustituido por Barzagli debido a una lesión.
El Barça comenzó nervioso, especialmente Mascherano, que se complicó la vida en dos ocasiones y regaló un córner a los juventinos. Sin embargo, a la primera que tuvo el Barça logró anotar. En el minuto 4, en una maravillosa jugada colectiva, Rakitic acabó anotando el primero a pase de Iniesta.
La primera parte comenzaba fuerte pero se fue viniendo abajo progresivamente. El Barça dominó y la Juve apenas creó peligro. Buffon, sin embargo, sí que tuvo que realizar dos buenas interveciones. Sin más goles nos fuimos al descanso, con un 1-0 que hacía justicia.
Pero en la segunda parte la Juve despertó y comenzó a llegar, aunque Luis Suárez tuvo la sentencia en el 48´ y no acertó. Quien sí acertó fue Morata, primer español en marcar en los dos partidos de semifinal y en la final en una misma edición de Champions. Magnífica jugada que inicia un taconazo de Marchisio y que acaba con un disparo de Tévez a la media vuelta que ter Stegen rechaza. Ahí estaba el ex del Real Madrid para meter el rechace. Era el empate a uno.
La Juve tuvo entonces sus mejores minutos y metió el miedo en el cuerpo a todos los culés. La dinámica había cambiado y se jugaba en campo del Barça. Hasta que llegó la jugada clave, la decisiva. Posible penalti de Alves sobre Pogba que Çakir no señala, y, a la contra, la coge Messi. En jugada individual, dispara desde la frontal, rechaza Buffon y aparece Suárez para convertir. Del 2-1 al 1-2. El Barça volvía a tenerlo muy cerca.
Los italianos empujaron en busca del empate, pero Piqué se mostró intratable y acabó con todo el peligro que rondaba su área. Neymar anotó el tercero y se lo anularon por mano, pero, ya en el descuento, volvió a marcarlo para sentenciar y que comenzara la fiesta blaugrana.
No podemos tampoco dejar pasar el adiós de Xavi Hernández, que entró por Iniesta en el último cuarto de hora. Logró su 25º título con su club. También tiene pinta de despedida lo de Pirlo, que lloraba amargamente al término del encuentro. Ambos se fundieron en un abrazo para la historia.
Xavi levantó la Orejona y Barcelona lo celebró. Un triplete que parecía imposible de repetir tras lograrlo con Guardiola, pero que volvió a suceder en este 2015. Ahora les toca disfrutar, y volver la temporada que viene a por el sextete.
Berlín fue ayer testigo de la quinta Copa de Europa lograda por el Fútbol Club Barcelona. Los culés suman cuatro de las Champions de los últimos diez años, tiempo en el que ningún otro club ha sido capaz de repetir. La Juve fue un digno rival y plantó cara, pero la superioridad técnica de los catalanes decantó el choque a su favor.
No fue la noche de Messi, quizá tampoco la de Suárez o Neymar. La UEFA entregó a Iniesta el premio a mejor futbolista del torneo, aunque, realmente, ayer ganó el colectivo. No hubo nadie que destacara claramente por encima del resto. Aunque, si hubiera que elegir a alguien, podría decirse que la UEFA acertó con el manchego. Pero comencemos por el principio.
A las 20:45 saltaban al césped del majestuoso Olympiastadion de Berlín los jugadores de ambos equipos. Allegri y Luis Enrique salieron con el once de gala, a excepción de Chiellini, que se vio sustituido por Barzagli debido a una lesión.
El Barça comenzó nervioso, especialmente Mascherano, que se complicó la vida en dos ocasiones y regaló un córner a los juventinos. Sin embargo, a la primera que tuvo el Barça logró anotar. En el minuto 4, en una maravillosa jugada colectiva, Rakitic acabó anotando el primero a pase de Iniesta.
La primera parte comenzaba fuerte pero se fue viniendo abajo progresivamente. El Barça dominó y la Juve apenas creó peligro. Buffon, sin embargo, sí que tuvo que realizar dos buenas interveciones. Sin más goles nos fuimos al descanso, con un 1-0 que hacía justicia.
Pero en la segunda parte la Juve despertó y comenzó a llegar, aunque Luis Suárez tuvo la sentencia en el 48´ y no acertó. Quien sí acertó fue Morata, primer español en marcar en los dos partidos de semifinal y en la final en una misma edición de Champions. Magnífica jugada que inicia un taconazo de Marchisio y que acaba con un disparo de Tévez a la media vuelta que ter Stegen rechaza. Ahí estaba el ex del Real Madrid para meter el rechace. Era el empate a uno.
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| El abrazo entre Pirlo y Xavi |
Los italianos empujaron en busca del empate, pero Piqué se mostró intratable y acabó con todo el peligro que rondaba su área. Neymar anotó el tercero y se lo anularon por mano, pero, ya en el descuento, volvió a marcarlo para sentenciar y que comenzara la fiesta blaugrana.
No podemos tampoco dejar pasar el adiós de Xavi Hernández, que entró por Iniesta en el último cuarto de hora. Logró su 25º título con su club. También tiene pinta de despedida lo de Pirlo, que lloraba amargamente al término del encuentro. Ambos se fundieron en un abrazo para la historia.
Xavi levantó la Orejona y Barcelona lo celebró. Un triplete que parecía imposible de repetir tras lograrlo con Guardiola, pero que volvió a suceder en este 2015. Ahora les toca disfrutar, y volver la temporada que viene a por el sextete.
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