La ilusión, el pilar de un pueblo

Por Jon Fernández (@Mur_98)

Si quieres, puedes. A ese lema se aferran gran parte de los seguidores del Athletic Club. El miércoles se enfrentan en la vuelta de los cuartos de la Copa del Rey al Atlético de Madrid. Por si fuera poco, el próximo domingo juegan también en San Mamés contra el otro gran conjunto madrileño, el Real Madrid.

Volviendo a la Copa, el choque de ida disputado en el Vicente Calderón lo ganó el Atlético con un gol del defensa uruguayo Diego Godín. No vimos mucho fútbol en ese partido, que resultó bastante decepcionante. Los colchoneros dejaron el balón al Athletic pero defendieron muy bien, y los leones no pudieron crear ocasiones. Mientras, el Atlético tampoco llevaba mucho peligro al arco de Herrerín. En cambio, aprovechando su poderío aéreo, el equipo local consiguió anotar un tanto que le coloca con ventaja de cara a la vuelta. Diego Costa pudo ser expulsado incluso en la primera parte, pero el colegiado le perdonó la que habría sido la segunda amarilla.

Visto esto, podríamos pensar que el Atlético tiene el pase a las semifinales prácticamente hecho. El conjunto del Cholo Simeone es segundo en la liga española y está empatado a puntos con el Barcelona, que es líder. Además el Atlético es el vigente campeón de la Copa del Rey. Desde que el técnico argentino llegó al club siguen una trayectoria plagada de éxitos y quieren ganar algún título una temporada más.

Pero nada más lejos de la realidad, la eliminatoria no está ni mucho menos decidida. Y no solo porque el Athletic esté situado en la cuarta plaza. Hay un elemento mágico que vincula a los leones con esta competición. Tradicionalmente, el conjunto bilbaino siempre ha sido el Rey de Copas. Es cierto que el Barcelona le arrebató oficialmente ese título honorífico, pero no hay ciudad en la que la Copa cobre más importancia que en Bilbao.

Y también encontramos un segundo elemento que hemos de tener en cuenta para el partido. El enorme apoyo que otorgará la parroquia rojiblanca, La Catedral, a sus jugadores. El día del partido las calles de la capital vizcaína se llenaran de gente horas antes para apoyar a su equipo. Esperemos que no intenten imitar las gravísimas faltas de respeto que algunos aficionados colchoneros cometieron, algo que, por desgracia, es muy habitual en el Calderón. Cerrado este pequeño paréntesis, volviendo al tema principal y hablando ya como el hincha del Athletic que soy, estoy seguro de que la gente llevará mañana la camiseta rojiblanca a todas partes. Porque el Athletic es una cuestión de familia, y mañana nos dejaremos nuestras gargantas apoyando a nuestro equipo. Los que vayan a San Mamés y los que no podamos acudir. Mañana finalizaremos el traslado de la magia de la vieja Catedral, ya demolida, a un campo de mismo nombre que vive mañana su primer partido grande de verdad. Porque la Copa siempre nos ha ilusionado, y por eso tenemos veinticuatro entorchados, pese a que oficialmente solo son veintitres. Llevamos ya casi treinta años sin ganarla pero últimamente hemos llegado a dos finales. Cierto es que hemos llegado a dos finales en el último lustro, y que en ambas el Barcelona nos pasó por encima. Pero eso no nos quita nuestra ilusión.

Mañana en Bilbao se volverá a recrear el ambiente de la semifinal que jugamos ante el Sevilla y en la que, pese a no ser favoritos ni mucho menos, ganamos por 3-0. El ambiente que Marcelo Bielsa creó en la temporada 11-12, especialmente en los encuentros de Europa League, donde el baño que se le dio al Manchester United fue bestial. Según David Moyes, actual técnico de los red devils, esa ha sido hasta hoy la mejor actuación visitante que ha visto en mucho tiempo en Old Trafford. Y tampoco eramos favoritos. Mañana mucha gente volverá a ilusionarse con su equipo, con ese con el que ha estado en momentos buenos y malos.

Yo creo que mañana el Athletic tiene opciones de darle la vuelta a la eliminatoria. Porque mi Athletic me ha dado razones. Las mencionadas anteriormente y más. Por ejemplo, la poca simpatía hacia Simeone por diversas razones y hacia el propio conjunto madrileño. Tenemos ilusión y ganas y eso es lo más importante. Sí, se puede.